Desde hace algún tiempo, se viene consolidando cada vez más la teoría de que la torre de Santa María no fue construida por los mudéjares en el siglo XIII sino por los zagríes en el XI, siendo, en su origen, un alminar-atalaya.
El asunto viene ya desde 1937, en un trabajo del profesor D. Francisco Íñiguez sobre las torres mudéjares aragonesas, donde hablaba de esta circunstancia. Desde los años 80, los arquitectos Javier Peña y José Miguel Pinilla, vienen detectando relaciones de incompatibilidad entre muchas torres aragonesas y las iglesias a las que acompañan, resultando en todos esos casos la conclusión de que esas torres son anteriores a las mismas y, por tanto, de procedencia zagrí, conclusiones a las que también llegaba en numerosos y reconocidos estudios el bilbilitano Agustín Sanmiguel Mateo.
Las bases para desmontar la teoría oficial y considerar como más segura ésta que venimos defendiendo, las establecí en mi trabajo “Tauste en los siglos XI al XIII”, contradiciendo de lleno la idea comúnmente admitida de que Tauste, antes de la llegada de Alfonso I de Aragón, no tenía siquiera entidad de población, sino que era simplemente un lugar con una pequeña fortaleza y unas pocas casuchas en lo que ahora conocemos como “Barrio Nuevo”.
El hallazgo del cementerio islámico supuso un espaldarazo definitivo para todo esto, pero no debemos olvidar otras pruebas reales y tangibles.
Una de ellas la constituía el hallazgo de un capitel en una casa sita en la C/ Marqués de Ayerbe, concretamente en la tapia de un corral, propiedad de D. Benito Galé. De este capitel se dieron noticias en varias publicaciones, una de ellas en el libro “Tauste, agua y vida” (2005), en un trabajo de Miguel Ángel Pallarés titulado “Entre Abirón y San Miguel”, donde afirma que este capitel nos puede llevar hasta la época islámica, datándolo, sin embargo, en la otra todavía más anterior, a mitad del siglo VII, es decir, en época visigoda. El profesor Cabañero le puso una fecha más concreta en un trabajo de 2007 (“Precedentes musulmanes y primer arte cristiano”), según el cual se trataría de un capitel de la época taifal, tallado hacia 1020. La procedencia de este dato y la coherencia que parece observarse al comparar el capitel en cuestión con otros de ese periodo inducen a quedarse con el mismo. Evidentemente, un capitel tan ricamente labrado no estaría solo en la construcción para la que fuera destinado, sino que habría otros más y otros elementos arquitectónicos en consonancia que demuestran la existencia de un edificio suntuoso en Tauste ya en los primeros años del reino de Saraqusta (recordemos que éste arranca de 1018, primera vez que aparece un estado independiente en estas tierras y con personalidad propia).
Pero el motivo de este artículo es dar a conocer otro capitel mucho más enigmático que el anterior. Lo tenía Zacarías Pellicer y decía que lo había encontrado en la escombrera de Tauste, entre las enronas procedentes del subsuelo de la Iglesia de Santa María. Recuerdo que explicaba muy bien la anécdota de que, por su forma redondeada, pudo rodar al ser descargado y alejarse del montón, por lo que se libró de ser cubierto con las siguientes enronas que allí se acumularon. Cuando me metí de lleno en estas investigaciones “zagríes”, recordé el capitel de Zacarías y me dirigí a él para contarle la importancia que esa pieza podría representar en todo esto. Me dijo que trataría de localizarlo e incluso se comprometió a hacer un buen reportaje fotográfico sobre el mismo, pero todo esto se truncó con su fallecimiento en diciembre del año pasado. A fecha de hoy, el capitel sigue sin aparecer, pero sí que han aparecido unas fotografías del mismo.
Las características de este capitel podrían corresponder a la época califal, o, incluso, emiral. En el primer caso, se situaría entre los años 929 y 1018, y en el segundo entre 756 y 929, sin poder descartar la posibilidad de que sea incluso de época anterior (visigoda).
De cualquier forma, cabe el mismo razonamiento que para el otro capitel: no estaría solo en la construcción para la que fuera destinado, sino que habría otros más y otros elementos arquitectónicos en consonancia que demuestran la existencia de un edificio suntuoso en Tauste. Pero, esta vez, ¿de qué época hablamos?.
¿Época visigoda?
¿Primera época islámica – periodo de los Banu Qasi?
Recordemos que, en la necrópolis islámica de Tauste, salen enterramientos datados a partir del año 650 (de momento).
Hemos corrido el origen de la historia conocida de nuestro pueblo nada menos que 450 años hacia atrás; cuatro siglos y medio, nada menos, que hemos incorporado a nuestro pasado.
¿Cuántas sorpresas más nos depara la investigación sobre la historia de Tauste?
Para que se entienda mejor el comentario de José Miguel Pinilla, añado a continuación el capitel de la mezquita de Barbastro, datado en el siglo XI.
Para que se entienda mejor el comentario de José Miguel Pinilla, añado a continuación el capitel de la mezquita de Barbastro, datado en el siglo XI.
Capitel islámico del Convento del Santo Sepulcro, de Zaragoza
4 comentarios:
Después de verlo durante tanto tiempo y de pensar que era emiral o califal por su sencillez, gracias a la foto que te envió Marisancho del capitel de Barbastro, ya me encajan las piezas. Resulta que el capitel de Zacarías es sólo medio capitel probablemente taifal, del que se ha conservado su parte inferior consistente en una banda de hojas de acanto lisas. Por encima de ésta iría otra banda más estilizada también de hojas de acanto y su aspecto completo sería de proporciones parecidas al de Barbastro, a los de la sala capitular del Convento del santo Sepulcro o los de la torre de la Magdalena en Zgza. El capitel de Benito Galé es de otra tipología, muy parecido a los de la mezquita de Tudela que algunos sitúan en la ampliación de Musa ibn Musa de los Banu Qasi
Gracias, José Miguel. Tiene mucho sentido lo que dices, sobre todo viendo que las hendiduras verticales se interrumpen por la parte superior. Pero no deja de ser un misterio el cómo y para qué partieron el capitel. Para que se entienda mejor todo esto, voy a poner al final del artículo la fotografía que me mandó Marisancho.
Releyendo el comentario, todavía le encuentro más sentido al comparar el capitel de Zacarías con los del Convento del Santo Sepulcro. Añado una foto en el artículo, para que se vea.
Amigo Jaime:
Quiero aportar desde el sur algún comentario al respecto. Entiendo que el capitel encontrado en el vallado es el que aparece en la primera fotografía. En mi opinión, aunque no se puede ver mucho su configuración, creo que por su decoración geométrica más trabajada, puede ser de época posterior a la califal, de taifas o algo posterior. Sería importante destacar su configuración exterior, cónica o cilíndrica; cuanto más cónica más antiguo podría ser. El capitel de la foto sobre fondo rojo, sí parece más califal, por su sencillez, su decoración con hojas de acanto y su sección uniforme cilíndrica, al menos en la pieza observada, donde se ha eliminado su parte superior que debía ser cónica. Comprobad que se parece mucho a los existentes en la parte de la ampliación de la mezquita de Córdoba de Halaken II. Sería interesante hacer un estudio del material empleado, si se corresponde con canteras de la zona, o bien si su procedencia puede ser de aportación externa, por algún otro testigo encontrado. De cualquier manera, creo que tenéis material, al menos, del siglo XI-XII que, con un estudio más pormenorizado, servirá para rebatir los "discursos mudéjares" que pretenden uniformar la región, sin admitir otro origen. Creo que, como te he comentado en alguna ocasión, es sumamente importante intentar justificar el asentamiento de Tauste en el tiempo, buscar los recursos económicos, o motivaciones estratégicas, que podrían haber propiciado su creación, el aprovechamiento de los árabes de un hipotético anterior romano o visigodo y, a partir de ahí, construir sus etapas. Creo que ese es la base fundamental del estudio.
Mario A. García Laguna
Arquitecto Técnico
Ingeniero de Edificación
Licenciado en Geografía e Historia
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