sábado, 8 de agosto de 2009

VISITA A TAHUST EN EL SIGLO XI


Me está ocurriendo últimamente que cuando me encuentro con buenos amigos, seguidores habituales de este blog, me reclaman que “a ver cuándo vas a poner más cosas, que llevo días entrando en tu blog y siempre aparece lo mismo”. A lo cual yo contesto que “tranquilidad, que uno escribe cuando puede (las aficiones hay que compatibilizarlas con el trabajo), además de que éste es un tema que no da para un artículo semanal, ni mucho menos”. Bastante tengo si consigo componer uno al mes, más o menos.

De todas formas, ya veis, aunque espaciados en el tiempo, son bastante larguicos. Recomiendo tomarlos con tranquilidad y no pretender absorberlos en cinco minutos. No os peguéis la paliza, tratad de asimilarlos con calma y disfrutad de ellos, si verdaderamente os motiva el tema, que merece la pena. Sobre todo, el PDF que contiene el trabajo completo, con los textos e imágenes de “Tauste en los siglos XI al XIII”, colgado el 30 de mayo de 2009 (donde pone “pinchar aquí”). Os aseguro que en él encontraréis datos sorprendentes. Podéis hacer uso de las herramientas que aparecen en el lado izquierdo (marcadores e índices de contenidos) para que se os pueda hacer más asequible y selectivo.

Como ejemplo de ello, esta vez os sugiero que leáis el contenido que abarca desde la página 16 hasta la 22, donde describo cómo pudo ser el Tauste del siglo XI (en torno a los años 1050). Recrearos en observar el plano de la página 19 y tratad de transportaros a aquella época.
Imaginad Tahust viniendo desde San José. En frente, el pueblo, presidido por su gran alminar. Todo un erial se extiende desde nuestros pies hasta llegar a lo que ahora es la calle Alfonso I el Batallador, desde la plaza Felipe V hasta Cuesta de Lanzán, pasando por plaza de la Reconquista. A esa altura comenzamos a ver las primeras construcciones, pequeñas, modestas y diseminadas, envueltas por una débil muralla de tapial que sigue la línea aproximada del tramo de Alfonso I antes descrito. Al fondo, envuelta por la blanca muralla de piedra de yeso, se divisa la medina, con su casco urbano abigarrado. De la muralla de tapial descrita hacia nosotros, como decimos, todo erial, ninguna construcción. Lo primero que divisamos a medida que nos acercamos es el cementerio. Una amplia explanada, prácticamente pegada a esa muralla, llena de losas y piedras colocadas de punta, cada una de ellas señalando un enterramiento, tumbas sencillas, perfectamente ordenadas, con los cuerpos orientados de forma que los pies apuntan hacia el nordeste y las cabezas hacia el suroeste. Los han colocado de esta forma, dentro de su fosa, envueltos en un sudario y apoyados sobre el costado derecho (postura natural de descanso). Así, la cara del difunto mira hacia el sureste, es decir, hacia la Meca.

Dejaremos el cementerio a nuestra derecha y entraremos en los arrabales de la ciudad por alguna puerta, a la altura de la actual plaza de Felipe V. Seguiremos por C/ Santa Ana, C/ Fray Angel Martínez y C/ Zaragoza, hasta llegar a la esquina Berroy, donde nos encontraremos con la Puerta de Saraqusta. Si decidimos no atravesarla y giramos nuestro camino hacia la izquierda, bajaremos, bordeando la muralla –que quedará siempre a nuestra derecha- al barrio mozárabe, donde viven los cristianos en torno a su ermita de San Miguel. Si la franqueamos, atravesamos la muralla de piedra blanca y nos adentramos en la medina, centro de la vida social y comercial del pueblo, donde se encuentra la gran mezquita con su imponente alminar.

Puede ser mediodía, en cuyo caso nuestro paseo se verá amenizado por la voz del muecín que, desde el alminar, está llamando en árabe (su lengua sagrada) a los fieles a oración.

Espero que disfrutéis del paseo.

3 comentarios:

Rockberto dijo...

Pues sí, me has pintado el paseo muy parecido a como me lo imaginaba (gracias, por otra parte, al trabajo que nos regalaste).

Ha sido muy grato.

Lo tuyo ya no sé cómo definirlo: ¿enorme divulgador? A lo mejor compendie de este modo lo que se me ocurre, pero me parece corta la cosa, porque ese tu entusiasmo de fondo -y tan hondo-, llega y contagia.

Chapeau, Jaime. Sigue así, por favor.

ZAGRÍ dijo...

Hace unos meses me encargaron la restauración de la alcazaba de Calatayud y gracias a eso he podido sacar nuevas conclusiones sobre la arquitectura militar del s. XI. Está en el blog de Zagr Alandalus.
Creo que es un campo grande para explorar con los castillos de Tauste y alrededores.

Anónimo dijo...

Sigo aqui,leyendo a raticos,como aconsejas,disfrutando de tus artículos como una enana.Gracias, por ello.
Nuestro pueblo desde la "antigüedad"con comillas o sin ellas...no se ha caracterizado precisamente por saber conservar lo poco o mucho que habia de otros pasados tiempos vividos por los taustanos, murallas,que hay que imaginar , por lo poco que queda de ellas...no digamos del convento de frailes,en el parque de las Ermitas ( con un "metro" de muro que cualquier dia se cae) con lo poco que me "han dejado " ver de el,intuyo que tenía su belleza,eso creo,ahi se me va la imaginación cuando me planto delante de su única pared,asi que os pido a gritos a los que sabeis y entendeis del tema que sigais muy, pero que muy de cerca a los responsables que han de preservar los pocos monumentos que nos quedan.
El otro día le comenté a una concejal...si veía normal en la casa de la cámara el poner una alarma de incendios en medio del arco de la mismisima entrada principal a la casa,yo la verdad,cuando lo vi al pasar desde el coche,me pareció una jugarreta de mis mal trechos ojos, asi que cuando pude volví andando al lugar y SI alli estaba, la alarma,orgullosa,gallarda,vestida de rojo "fuego" deshaciendo el arco aragonés de la entrada,como si no se hubiese podido colocar en otra esquina o yo que se...debajo del balcón, cuando hay personas que luchan por conservar fachadas tal como eran , sacar arcos,ventanas,etc.que en tiempos han estado ocultos por obras unas encima de otras ...van "estos" y ponen semejante talabarte presidiendo como digo la entrada principal...sigo enfadada, cabreada,porque ahi sigue ,y eso que me dijo la concejala que se lo diria al alcalde,aunque también me advitió la chica,que a lo mejor...no se ha podido colocar en otro sitio.Permíteme Jaime que escriba una frase soez..."pamear y no echar gota",ya me dirás que opinas de mi denuncia contra la alarma de fuegos.
Un saludo.
Ana.