Hace más de siete años publiqué esto en mi blog y me supuso claras
muestras de resentimiento por los que se sintieron aludidos. Se trataba de una
denuncia ante la falta de apoyo por parte del Ayuntamiento de Tauste en aquel
proyecto ambicioso en el que nos embarcamos desde la Asociación Cultural “El
Patiaz” de crear un campo de trabajo arqueológico en un solar de la maqbara. En
aquella ocasión me quejaba de lo mucho que se había perdido Tauste por esa falta
de implicación institucional. Me consta que, lejos de perdonármelo, ese
resentimiento y sus efectos han ido en aumento.
Se mostraron dolidos por el estilo ácido que empleé en aquel
artículo, pero es que no pude hacerlo de otra manera. Ante la escasa
repercusión que aquello tuvo a nivel de promoción de nuestro pueblo de cara al
exterior (y la que tuvo fue gracias a El Patiaz), para hacerme entender,
comparaba la triste realidad de aquí con cómo se hubiera podido gestionar en
otro lugar con decidida vocación de aprovechar las ocasiones que se dan en la
vida.
Volvemos a lo mismo, pero a mayor escala, porque lo que ahora
se ha destapado son 4.000 m2 de necrópolis en plena avenida Obispo Conget. Lo
sabíamos. No era ninguna sorpresa. El asunto era muy importante, tanto como
para haber planificado los trabajos minuciosamente, compatibilizándolos con la
gran afluencia de turismo que hubiera supuesto de haberlo gestionado
adecuadamente. Promocionado como el cementerio islámico más espectacular de
Europa en el momento actual de su excavación, Tauste merecía que esa obra hubiese
esperado a que pasara la pandemia. Desde el Ayuntamiento tendría que haberse
coordinado a los gremios de hostelería y comercio para haber hecho un frente
común: “chicos, vamos a hacer esta obra y vamos a petar el pueblo; tenemos que
estar preparados para aprovecharlo”. La excavación arqueológica tendría que
haberse planteado como un campo de trabajo, donde hubieran venido estudiantes
de arqueología de diversas partes del mundo a trabajar gratuitamente, como lo
hacen en el yacimiento de los Bañales. Las áreas de actuación debidamente
planificadas por fases para minimizar el trastorno a los vecinos. Nada de esto
se ha hecho y este tren no volverá.
Menos mal que, en medio de este desierto, El Patiaz supo dar
la nota correspondiente y conseguir que nuestra maqbara fuese conocida en todo
el mundo en pocos días. Hemos recibido información del mundo islámico acerca de
un gran mercado turístico en países como Turquía, Malasia, Indonesia, etc., que
recibirían con curiosidad y positivamente nuevos destinos como nuestro pueblo.
Encomiable también la labor de José Ángel Cardona y su equipo, que, a pesar de
las dificultades impuestas por la pandemia, han conseguido resultados
espectaculares de afluencia de grupos, siempre con las medidas de seguridad
oportunas. ¡Qué hubiera podido ser esto en tiempo normal! Tal y como le dije al
presidente Lambán el día de su visita a la necrópolis: “si importante es el
cementerio, casi es lo de menos, porque el cementerio solo es el reclamo; lo
trascendente y lo que hay que vender al exterior es el legado que nos dejaron
las gentes que aquí fueron enterradas, que es la torre". El cementerio se
tapará, pero la torre ahí estará siempre, y en torno a ello, con ganas, con
trabajo y con ilusión, se pueden hacer muchas cosas. Aragón, más temprano que
tarde, sacará pecho por ese patrimonio zagrí tan nuestro y tan singular, y me
da que, al paso que vamos, Tauste, que podía haber ido a la cabeza por una vez
en la vida, acabará quedándose atrás o en el olvido por falta de iniciativa
local. Ya lo sufrimos en la Expo de 2008 dedicada al agua, donde no tuvo
presencia alguna nuestro canal y donde hubo una sala en el pabellón de la DPZ
con imágenes del mudéjar de toda la provincia y faltaba nuestra torre.
Causa estupor la falta de ambición de un pueblo donde hay
unos colectivos directamente afectados, pero también sumidos en esa pasividad
que impera. Tauste se nos muere lentamente desde hace años y no nos damos
cuenta. Parece un efecto parecido al de los caracoles cuando se los pone a
engañar, que se encuentran muy a gusto en el agua calentica y, a lo que se dan
cuenta, ya están muertos. Copio y pego lo que Wikipedia dice de nuestro pueblo
después de exponer su evolución en los últimos años: “Tauste se consolida como
una de las poblaciones de menor dinamismo de su entorno si la comparamos con …”.
Geográficamente, tenemos una situación privilegiada. ¿Queremos
dejarles a nuestros hijos el mejor lugar donde vivir o nos da igual que tengan
que buscarse la vida fuera? Siempre he dicho que si Ejea estuviera donde está
Tauste, aquí habría una ciudad como Tudela o mayor, y si Tauste estuviera donde
está Ejea no sería más que Castejón de Valdejasa, dicho esto con todo el cariño
y respeto hacia nuestros vecinos castejoneros, que luchan dignamente por la supervivencia
de su pueblo. El progreso o el declive lo traen los dirigentes y la implicación
(o falta de implicación) de los diferentes colectivos, y no será porque Tauste
no tenga gente brillante en todos los ámbitos, que la hay, pero… ¿y ese conformismo? Se trata de
sumar voluntades y no de dividirlas, y está claro que aquí sabemos hacer muy
bien tanto lo uno -por fortuna- como lo otro -por desgracia-.
Mientras tanto, así estamos.